Las mantas con peso ayudan a aliviar el estrés y la ansiedad

Una solución para relajarse después de un día ajetreado.



Antes de que apareciera el Covid 19 en nuestras vidas, los trastornos de ansiedad ya eran una enfermedad mental de gran relevancia en Portugal. Pero, más de un año después del inicio de la pandemia mundial y los cierres obligatorios nacionales, es lógico que la mayoría de las personas se sientan más ansiosas que nunca.

Según varios expertos, la ansiedad -que afecta a niños, adultos y ancianos- es uno de varios efectos mentales provocados por la pandemia. Entre ellos se encuentran overthinking (pensar demasiado), empeoramiento del trastorno obsesivo-compulsivo, falta de sueño, agotamiento familiar y depresión.
Un futuro incierto y el cambio drástico en nuestra rutina diaria han agudizado el problema, provocando en ocasiones un cansancio y un agotamiento emocional inusuales. Junto a este escenario, desde el inicio de la pandemia, el sueño de los portugueses también ha empeorado un 10%, generando cambios mentales y psicológicos. Demostrando que el problema del sueño es una realidad a nivel nacional.

Casi dos tercios de la población informa dormir mal y el 59% dice tener dificultad para conciliar el sueño. Junto a estos números, cabe señalar que Portugal también se encuentra entre los 5 primeros países de Europa que más ansiolíticos, antidepresivos y somníferos consumen (alrededor de 10 millones de paquetes por año).


¿COMO SOBREVIVIR?

Ahora, más que nunca, es necesario afrontar la situación y buscar soluciones sencillas y cómodas. Una de las respuestas está en adquirir una manta con peso: el arma secreta contra la ansiedad, el estrés, las preocupaciones y los miedos.

Nuestros antepasados ​​ya utilizaban pieles de animales para mantenerse calientes, pieles que podían superar con creces su propio peso corporal. Años más tarde, la ciencia comenzó a utilizar este tipo de mantas para tratar algunos problemas de salud mental como la ansiedad, el autismo o el trastorno obsesivo-compulsivo. Así pues, las mantas lastradas no son precisamente una novedad.

Así, las mantas lastradas o como se las denomina internacionalmente "cobijas lastradas", son productos desarrollados para mejorar la calidad del sueño.

Pero, ¿cómo una manta, que pesa entre 5 y 15 kilos, puede ayudarnos a dormir mejor?

El peso de esta manta, que está recubierta de algodón puro, se crea utilizando granos de vidrio tratados que se dividen en la superficie de la manta para crear el peso ideal para cada persona. Dando la sensación de un fuerte abrazo. El secreto del éxito está en el relleno de las almohadillas, que están divididas por los distintos bolsillos acolchados de la manta, haciendo que la presión de la manta se distribuya uniformemente por todo el cuerpo. Es precisamente esta presión la que, según algunos estudios, puede aliviar la ansiedad y el estrés en quienes sufren noches inquietas o les cuesta conciliar el sueño.

La manta pesada también utiliza la técnica DTP, es decir, “Deep Touch Pressure” que, como su nombre lo indica, este método utiliza el peso extra de la manta para aplicar presión localizada en los músculos, relajando el cuerpo similar a un masaje, un efecto que proporciona una noche más reparadora. Esto sucede, según explica la neuropsicóloga Margarida Mendes, de la Clínica de Santo António del Grupo Lusíadas Saúde, ya que la manta pesada ayuda al cuerpo a liberar “hormonas de la felicidad” -como la serotonina- y al “sueño” -en el organismo. como la melatonina – que permiten una combinación hormonal provocando sensaciones de calma en el sistema nervioso. Además, también evita que nuestro cuerpo produzca demasiado cortisol (una hormona del estrés).

Hay varios formatos, tanto para adultos como para niños, y cada persona debe elegir el peso de su frazada en función de su peso corporal. La idea siempre es seguir la regla de que la manta debe ser equivalente al 10% del peso de la persona.



LOS BENEFICIOS


1. Reducción de los niveles de ansiedad contribuyendo a la disminución del cortisol;

2. Aumentar los niveles de melatonina y serotonina por la noche, contribuyendo así a las alteraciones sensoriales y al sueño;

3. Los pacientes con trastornos del espectro autista y de Asperger también usan estas mantas para sentirse relajados y tranquilos;

4. Ayudan a quienes padecen las enfermedades de Alzheimer y Parkinson;

5. El peso minimiza el movimiento del cuerpo para proporcionar un ciclo de sueño REM más profundo;

6. Disminuye los niveles de cortisol (hormona del estrés) reduciendo también el ritmo cardíaco y la presión arterial;

7. Te ayuda a conciliar el sueño más rápido.